Las series estrella de la revista Planeta Manga saltan al formato tomo y confirman la gran cantera de autores españoles de este estilo
A la chita callando. O no tanto. La revista Planeta Manga salió al mercado en octubre de 2019 con todos los visos de ser, cuanto menos, una jugada de alto riesgo. ¿Podía funcionar en España una revista al estilo japonés, pero con una plantilla integrada solo por autores nacionales? Los antecedentes hacían más que razonable la duda: el escaso recorrido de la mítica Shônen Magazine en los años 90 y la fallida experiencia hace unos años de la Línea Gaijin de la extinta Glénat no eran señales halagüeñas. Sin embargo, parece que los tiempos han cambiado. La publicación de Planeta se aproxima a su octava entrega, dando hueco a nuevas voces -casi todas surgidas de la Escola Joso– y de sus páginas empiezan a saltar a formato tomo algunas de sus series estrella. La primera en hacerlo fue Alter Ego de Ana C. Sánchez (una dibujante murciana muy a tener en cuenta por su nivel de producción y calidad), y ahora le toca el turno a Gryphoon, del granadino Luis Montes.
Gryphoon nos sumerge en Ark, un mundo de fantasía heroica en el que conviven diversas razas de humanos, y donde la principal amenaza para la paz son los eckhos, unos misteriosos seres oscuros. Los encargados de combatir a estos monstruos son los gryphoon, un equipo de élite cuya formación tiene lugar en una selecta academia militar a la que solo los poseedores de una fuerza y habilidades extraordinarias pueden acceder. Y ese es justo el propósito de la joven Noha Argonnar, no tanto para luchar – que también- como para tratar de averiguar qué se esconde tras la extraña muerte de su hermano, uno de los guerreros más destacados.
La prueba de acceso para los cadetes es durísima y encierra mil peligros. Sola no puedes; con amigos, sí… Así que Noha se alía con otros cuatro candidatos: un ex convicto, un gigante, un ondina y una silvana. ¿Podrán cumplir juntos su sueño?
Shônen a su manera
Aunque las demografías en el manga cada vez están más en cuestión, la exitosa fórmula de Dragon Ball, continuada por otras series como Naruto, One Piece o, más recientemente, Guardianes de la noche, ha hecho que al hablar de shônen vengan a la cabeza inevitablemente una serie de tópicos. El camino del héroe, los amigos, los rivales que luego se vuelven aliados, la acción trepidante, las pruebas cada vez más duras… Gryphoon cumple con la mayoría, pero su autor tiene la madurez suficiente para marcar su propia senda. La elección de una protagonista femenina, con muchos matices en su personalidad, en lugar del típico muchacho fuerte y bonachón es la principal señal, aunque no la única. En este sentido, Luis Montes tiene un muy buen ejemplo a seguir en el trabajo que realizó el también granadino Kenny Ruiz en Dos Espadas.
Los nuevos lectores desprejuiciados seguro que disfrutan mucho con la frescura de Gryphoon. También lo harán los veteranos que cada cierto tiempo lamentan que en nuestro mercado ya no hay historias “de género” -en este caso, fantástico- como antes. Una nueva generación de autores pide paso con la variedad y la diversidad como banderas.
Gryphoon, de Luis Montes
Planeta Cómic. Rústica, b/n y color, 224 págs., 12,95 euros.
Artículo publicado originalmente en la revista Z